Las tartas son un manjar que todo el mundo debería tener la oportunidad de probar, pero muchas veces por enfermedades nos limitan, como por ejemplo los diabéticos, donde tienen problemas para comer azúcar, es por ello que decidí crear mi primera tarta especial para diabéticos, no está libre de azúcar 100% pero si es bastante bajo en azúcares.
Llevé bastante cuidado a la hora de seleccionar los ingredientes, así que os recomiendo ver bien precios y las cantidades de azúcar que llevan a la hora de comprar. Imagino que con algo más de experiencia podría seleccionar mejores ingredientes para la tarta, así que aquellos que conozcan mejor este tipo de ingredientes, posiblemente tengan cierta ventaja a la hora de preparar la tarta.
Los ingredientes para realizar esta receta son algo más especiales y caros que solo podrás adquirir en tiendas especializadas, ya que os serán difíciles de encontrarlos en supermercados muchos de ellos.
Materiales necesarios para elaborar la receta:
- Molde desmontable
- Peso
- Una cazuela o cazo
- Papel de hornear
- Mortero o triturador
Ingredientes para la base del pastel:
- 1 paquete de galletas sin azúcar (usaremos unos 200 gramos)
- 75 gramos de mantequilla sin sal
Ingredientes del relleno de la tarta:
- 500 ml de nata líquida para montar al 0% de materia grasa
- 3 cucharadas de edulcorante o fructosa
- 500 gramos de queso light de untar
- Mermelada de frambuesa sin azúcar
- Sobre de gelatina en polvo o deshidratada
Base de la tarta de queso y frambuesa para diabéticos
Cogemos las galletas y las machacamos con el mortero o la trituradora hasta hacerlas polvo. Cuando estén los 200 gramos de galletas, los juntamos con 75 gramos de mantequilla, amasamos todo hasta que quede una masa y la pegamos a la base de nuestro molde. Antes de formar la base en el molde, acordaros de poner el papel de hornear.
Después de esto, se mete el molde a la nevera el molde y se deja reposar mientras preparamos el relleno de la tarta.
Relleno de pastel de queso con mermelada de frambuesa para diabéticos
Batimos la nata líquida hasta que quede medio montada, entonces vamos agregando el resto de ingredientes y los continuamos batiendo para que se vayan mezclando bien.
Lo primero que metí fue el queso light para untar, ya que es más denso y puede costar algo más para deshacer, después el yogur desnatado de limón, la gelatina deshidratada y por último el edulcorante.
Una vez está esto batido, pasamos a volcarlo dentro del moldecon nuestra base y lo dejamos en la nevera unas 6 horas de reposo. Recomiendo usar gelatina en polvo para que el proceso sea más fácil.
Una vez pasado el tiempo y veamos que tiene consistencia, sacamos la tarta del molde, le untamos la mermelada de frambuesa y la servimos a la mesa.
Decoración
Para decorar puedes usar alguna fruta para colocarla por encima o en el plato, o alguna figurita realizada con chocolate puro que normalmente suele ser más bajo en azúcar.